Cuando se decide instalar una estructura de madera para el exterior, como son los porches, pérgolas o cenadores, se está llevando a cabo una excelente decisión, ya que el dinero invertido, mucho menos de lo que se suele imaginar, le va a proporcionar un espacio único, donde poder disfrutar de agradables momentos durante el verano e incluso en las temporadas menos cálidas.
La alternativa de un porche de madera o cenador de madera cerrado, le va a proporcionar un espacio en confort similar a las estancias de interior, pero disfrutando además de la ventaja del contacto con la naturaleza y evitando la rutina de permanecer en las habitaciones de interior.
En el caso de las pérgolas de madera, sean adosadas o independientes, pueden utilizarse sin cubrir, aprovechándose solo para delimitar y destacar un espacio de disfrute al aire libre, o utilizar la opción de toldos, que le permite estar en un espacio a cubierto, cuando lo necesita. Son estructuras muy utilizadas por su gran valor estético, dado que el contraste de sombras y claros que estas estructuras proyectan sobre las superficies, así como un cuidado diseño en consonancia con el de la vivienda, embellecen el espacio exterior y lo hace mucho más disfrutable.
Este tipo de estructuras, además de aportar un espacio para el disfrute del exterior, pueden ser utilizados también en una vertiente más práctica, como garajes o carpots para guardar coches, especialmente en los diseños de tejado a dos aguas.